El castillo de La Villa se levanta sobre la cima del cerro en época musulmana en los siglos IX y X y es ampliado en el siglo XII cuando Alfonso VIII concede el fuero a Ocón. No hay nuevas construcciones en el recinto hasta el siglo XIX cuando en las guerras carlistas se acantonan 40 hombres y se arregla parte de la fortaleza.

El asentamiento con el que cuenta es hoy uno de los lugares desde los que se disfruta una de las mejores vistas y de él todavía se conserva parte del alzado de una cortina de más de dos metros de espesor muy larga en mampostería y tierra en el noroeste y rematada hacia el norte por un torreón redondo. Hacia el sur estaría el recinto principal y se adivina alguna otra dependencia en dirección hacia el pueblo, de las que formaría parte la iglesia de Santa María. En la cima de esta fortaleza se han encontrado restos cerámicos celtibéricos y medievales.

Dado la diferencia de fechas en las que se construyó podemos distinguir dos partes:

- Una obra primitiva, de origen musulmán del siglo IX  que se componía de la cortina rematada en la torre cilíndrica.

- Otra del siglo XII, tras la concesión del fuero de Alfonso a la Villa en 1174, que constituía una amplificación de esta